El Real Madrid goleó al Cornellá y ya es equipo de octavos de final (espera ya al Atlético de Madrid o al Hospitalet). Todo fueron alegrías para el equipo de Carlo Ancelotti que sumó su decimoséptima victoria consecutiva y parece no tener frenos.
Muy cambiados pero con el mismo juego alegre que viene deslumbrando desde el pasado 16 de Septiembre. Ya son 17 victorias consecutivas y con unos registros inigualables. Medrán, Pacheco, Chicharito, Nacho, Illarramendi, Khedira fueron algunos de los cambios. Nuevamente sin los Sergio Ramos, Cristiano Ronaldo, Gareth Bale o Iker Casillas entre muchos otros, pero con un equipo B liderado por unos timones que rozan la perfección por partido: Isco e James. A estos se le unió un nuevo pretendiente: Álvaro Medrán. Hablaremos más adelante de la aportación del cordobés.

Tras el fallo vinieron los goles blancos. Tú puedes perdonar al Real Madrid, ellos no. Los de Ancelotti fabricaron una jugada de ensueño que terminaría con un remate de ensueño, de vaselina, James Rodríguez ponía su sello en el partido.
No sólo marcó, también asistió. Un pase entre líneas magistral que culminaría Isco Alarcón batiendo en el mano a mano a Iñigo. Esto no fue todo. Quedaba mucha tela que cortar y no se tuvo que esperar. Rozando la primera media hora de partido, James había sellado y tintado la camiseta del Cornellá a color blanco. El único que se vio durante el choque. El colombiano finalizó de lujo con un disparo pegado a la cepa del palo un centro de lujo (exquisito) de Chicharito Hernández.
Todo fueron buenas noticias en el Bernabéu. Irrupción de Álvaro Medrán (el chaval necesita minutos y tiene calidad en sus piernas, encontró su pareja de baile junto al talento innato de Isco Alarcón), Debut de Javi Muñoz, el de Parla, debutó con Carlo Ancelotti en el partido copero y dispuso de media horapara demostrar su calidad. Desparpajo no le faltó. Y Chicharito Hernández. Tras el pase fantástico para el 3-0, puso el 4-0 él mismo. Con la ayuda de Coentrao y Borja López que se introdujo el balón al fondo de las mallas tras un 'larguerazo' del mexicano.

Finiquitado y refiniquitado el partido, González González señaló el final y el Real Madrid vivió una noche copera de alegrías (menos los sustos de Khedira y Varane, ambos sustituidos por precaución) en las que destacó una por encima de todas: el regreso de Jesé. El pequeño CR7 está de vuelta. Cayó la decimoséptima y ya espera el Celta que perdió frente al Las Palmas su partido entresemanal antes de visitar en Liga el Santiago Bernabéu.