Debutaba España en el Mundial de Brasil con Xabi Alonso, Sergio Ramos e Iker Casillas en el once titular. La selección española se veía las caras con la selección holandesa en una rememoración de la pasada final en Sudáfrica. Esta vez no ganarían los españoles, en Salvador de Bahía se daría el primer paso y sería en falso. Holanda vapulearía a la selección de Del Bosque en un partido con derroche físico que debe quedar para el olvido. Un golpe bajo histórico.
Tras seis años ganándolo absolutamente todo (Eurocopa – Mundial – Eurocopa) la selección española se presentaba al Mundial de Brasil como una de las máximas favoritas. En la noche de ayer se terminó con una debacle que tuvo como desemboque una cura de humildad por parte de la Orange. El equipo de Louis Van Gaal destrozaría a la selección española en el debut de ambos en la cita mundialista.
A pesar de que el combinado nacional empezaría con buen pie, un gol de penalti (inexistente eso si) sobre Diego Costa lo transformaría Xabi Alonso, pero la película cambiaría tras un fallo de Silva clamoroso de cara a gol que hubiese supuesto el 2-0. El fallo del canario de Arguineguin sería el punto de inflexión del choque, una ocasión marrada que daría alas al combinado nacional holandés con Robben por cabeza.
Al filo del descanso, se gestaría la debacle, un golazo de Robin Van Persie tras la salida en falso de los dos centrales y la no salida de Iker Casillas empataría el encuentro. Un remate espléndido del ariete matador del Manchester United que terminaría al fondo de la red.
A partir de ahí la selección se desconectó del partido y el dominio se traduciría en peligro de la selección naranja. Comenzaría la segunda parte con una lluvia torrencial, como si de metáfora se tratase, comenzarían a caer los goles del lado holandés.
La vapuleación la comenzaría el artífice de la misma. Arjen Robben se vengaría de una alevosa manera de la final de Johannensburgo. Primero como si estuviese en su casa se internaría por medio de los dos centrales de la selección para acabar batiendo a Iker Casillas que quedaba totalmente vendido ante el regate del talentoso jugador del Bayern Munich.
El tercero, tras un larguero de Robin Van Persie, llegaría por medio la testa de Vrij que se acabaría adelantando a un Casillas tumbado (tras una falta no señalada de Sneijder). Esta vez el gol no debería de haber subido al marcador.
El cuarto si que sería fallo clamoroso del guardameta del Real Madrid. El portero, lejos de su nivel habitual, le regalaría el cuarto gol a una Holanda que quería ver sangre española. Van Persie presionaría y saldría ganando en la jugada subiendo el cuarto gol entre la locura mezclada en las gradas entre holandeses y brasileños.
El quinto gol caería prosiguiendo los anteriores. Un cambio inexplicable de Del Bosque (dejando sobre el césped a un acabado Xavi o dejando los dos laterales sobre el campo sin ánimo de remontada) quitando a Xabi Alonso y poniendo en la hierba a Cesc Fábregas en una posición no habitual para él.
Sería cuestión de tiempo la ‘manita’ y llegaría en el 80′. Robben dejaría por los suelos a la selección española, y con un Casillas gateando en su propia área, pondría el quinto y definitivo gol en el electrónico. Una goleada escandalosa de la selección de Van Gaal que hace temblar el mundo y que acaba con un ciclo de una selección española que si quiere estar en Octavos se lo tendrá que 'currar' sobre el verde. El próximo partido será contra la Chile de Arturo Vidal y será la primera de las 6 finales que quedan por disputar.
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